Córdoba: estudiantes advierten que aumentaron los arrebatos en Ciudad Universitaria
Desde la Federación Universitaria proponen crear corredores seguros y reforzar la vigilancia. También advierten que desaparecieron controles policiales en Nueva Córdoba. Las autoridades universitarias dicen que la seguridad en el sector es satisfactoria y que casi no hay denuncias.
Una moto pasa cerca de una estudiante que camina con su celular en la mano, se lo arrebata y acelera por la avenida Valparaíso, en plena Ciudad Universitaria. La joven grita e intenta perseguirlo, pero no lo logra. Otros quieren ayudarla, pero el delincuente, abordo de una moto negra, logra escapar.
Unas amigas que esperan el semáforo para cruzar la calle, son testigos de todo. Son las 13, y una de ellas, Celeste, acaba de salir de clases. “Fue a plena luz del día, y no había ni un solo policía alrededor”, comenta la estudiante.
Ciudad Universitaria se encuentra en el corazón de la ciudad de Córdoba. Ocupa un enorme predio de unas 10 cuadras por 12, por el cual circulan una gran porción de sus 120 mil estudiantes. Si fuera propiamente una ciudad, sería una de las más pobladas de la provincia.
Como a cualquier otro sector de Córdoba, la inseguridad castiga a este predio universitario, con la particularidad de que se trata de un territorio de jurisdicción federal, por lo que su patrullaje no es responsabilidad de la Policía de Córdoba, sino de la Policía Federal, que tiene un reducido número de efectivos en la capital cordobesa.
Para la seguridad de Ciudad Universitaria, la conducción de la UNC contrata a una empresa privada, la que a su vez emplea adicionales de la Policía y otros agentes privados para la tarea.
Problema recurrente
Brenda, estudiante de primer año de Comunicación Social, también sufrió un arrebato a la salida de clases, cuando llegaba a las inmediaciones de Plaza España. “Estaba por guardar mi celular en la mochila, y pasó un chico en bicicleta y me lo arrebató. En esa zona suele haber policías, pero ese día no había nadie. No sabía qué hacer porque el celular era indispensable, es con lo que me manejaba para hacer los trabajos de la facultad”, lamentó.
“Un compañero vio unos policías y nos acercamos para contarles lo que había pasado, supuestamente lo estaban buscando”, indica Brenda, pero reconoce que no hizo la denuncia formal. “No hice la denuncia porque, la hiciera o no, el resultado iba a ser el mismo”, dijo resignada.
Gastón Soler, presidente de la FUC (órgano que nuclea a todos los centros de estudiantes de la UNC), indicó que en las últimas semanas aumentaron los casos de arrebatos en el campus universitario, principalmente sobre la avenida Valparaíso y el bulevar De la Reforma, las arterias más transitadas del sector.
Según el dirigente, la situación afecta de la misma forma a estudiantes de todas las facultades que se localizan en el predio universitario. “Hace bastante tiempo que tenemos esta problemática en los barrios de las inmediaciones, fundamentalmente en Nueva Córdoba. Pero recientemente hemos notado que los casos aumentaron en el campus y a cualquier hora del día. También vemos que ya no están los controles policiales que había en el Parque de las Tejas y en el bulevar Yrigoyen, por lo que también hemos hecho gestiones ante la Provincia y la Municipalidad”, indicó Soler.
Recientemente, otra estudiante sufrió un arrebato del que le costará reponerse. “A una chica de odontología le robaron la valija donde llevaba los instrumentos de estudio. Es un equipamiento muy caro que necesita para realizar sus prácticas, estimamos que perdió más de 600 mil pesos”, comentó Soler.
“Esta semana, desde el Centro de Estudiantes de Lenguas presentaron una nota alertando por el aumento de arrebatos. Ahora estamos comunicándonos con todas los centros de estudiantes para elaborar un diagnóstico preciso de cuál es la situación en cada facultad, pero seguramente en los próximos días llevemos al Consejo Superior un pedido para que se refuerce la vigilancia y la iluminación, y un proyecto para que se organicen corredores seguros para los peatones, fundamentalmente en los horarios de salida de la cursada”, explicó el estudiante.
La palabras de las autoridades
El secretario de Asuntos Eestudiantiles de la UNC, Leandro Carbelo, indicó que no tienen reportes de que haya un aumento en la inseguridad en el sector. “Hay inseguridad en toda la ciudad, pero los ataques a los estudiantes son más frecuentes en los barrios, cuando regresan, que en Ciudad Universitaria. Incluso en Nueva Córdoba, a pocas cuadras, hay muchísimos robos y arrebatos”, indicó el funcionario.
Por su parte, el secretario general del Rectorado, Roberto Terzariol, afirmó que tienen relevada la seguridad en el campus, fundamentalmente en las principales vías de tránsito, y que no tienen indicios de que se hayan incrementado los hechos delictivos en el predio. El funcionario afirmó que se comunicó con algunos dirigentes estudiantiles que encabezan el planteo, pero que no le refirieron casos concretos.
“Según nuestros datos, el número de episodios es ínfimo. Por supuesto que a cualquiera que le pasa le indigna, y no debiera pasarle a nadie, pero si tenemos en cuenta que la ciudad universitaria tiene 120 hectáreas, y tenemos 120 mil estudiantes de los cuales aproximadamente 60 mil circulan a diario por el predio, entonces la cantidad de casos es mínima. Imaginemos que si en una ciudad de 120 mil habitantes hubiera cinco episodios de inseguridad al mes, hablaríamos de que la situación es segura”, indicó Terzariol.
“Todos los días, incluso, por la tarde y noche, hay muchísimas personas que vienen a realizar deportes, a caminar o correr, por el campus, y es muy seguro. Hemos reforzado la iluminación del predio, fundamentalmente de los senderos más transitados y tenemos garitas de seguridad, además de los efectivos apostados en las facultades y calles principales”, agregó.
El funcionario dijo que existe la voluntad para abordar el asunto y asignar los recursos que hicieran falta pero, al menos por el momento, ven que la seguridad en la Ciudad Universitaria funciona “satisfactoriamente”.
Si bien el número de denuncias no refleja que en Ciudad Universitaria haya una situación preocupante, la mayoría de los testimonios de las víctimas no terminan en una denuncia.
Como el objetivo de los arrebatos son bienes que rara vez tienen seguro (mochilas, celulares, o computadoras), los damnificados no encuentran utilidad en realizar el trámite de ir a la unidad judicial y dedicar horas a brindar su testimonio. Quizás por eso, los números no están contando lo que, según los estudiantes, está pasando.
Fuente: lavoz.com.ar