Coronavirus: Europa no logra frenar la segunda ola de brotes y Estados Unidos arde

Las (buenas) noticias sobre el desarrollo de una vacuna que logre frenar al coronavirus no alcanzan a para aminorar la crueldad del panorama en las zonas más golpeadas por la pandemia.

Europa atraviesa una situación “muy preocupante” según los expertos producto de una segunda ola de contagios que no da tregua. En tanto, Estados Unidos registró, en sólo 10 días, un millón de personas infectadas que sumadas al total desde el inicio del brote alcanzan los 10,25 millones.

La situación ante la pandemia en el Viejo Continente es “muy, muy preocupante” y “todos nuestros indicadores van en la mala dirección”, afirmó la directora del Ecde, Andrea Ammon.

Europa superó los 317.000 fallecidos por coronavirus y las 13 millones de infecciones, en medio de una segunda ola más fuerte que la primera de marzo y que llevó a varios países como Italia, España y Francia a decretar confinamientos.

Hungría, uno de los más afectados en proporción a la población, se sumó ayer a la lista de países que comenzaron a aplicar un reconfinamiento parcial que va a durar al menos 30 días, acompañado de un toque de queda nocturno, mientras que Suecia, abandona su política de responsabilidad social para aplicar restricciones.

En la actual situación, “hacer bajar el número de casos podría tomar más tiempo” que durante la primera ola de contagios en marzo y abril, advirtió Ammon.

Italia superó ayer la barrera del millón de casos tras sumar en el último día casi 33.000 más así como 623 fallecidos, el peor dato en este ámbito desde principios de abril.

Según el Ministerio de Salud, en las últimas 24 horas hubo 32.961 nuevos casos entre unos 225.000 test efectuados en todo el país, lo que supone una tasa de contagio del 14,61 por ciento, un dato inferior al del martes, cuando hubo 35.098 casos por casi 217.800 pruebas diagnósticas.

Cifras y récords

Sin embargo, el número de decesos sigue en aumento y ayer alcanzó llegó a los 623 fallecidos, frente a los 580 de la víspera. Con ello, la pandemia deja ya en el país 1.028.424 casos y 42.953 víctimas mortales.

“Hacen falta medidas drásticas, como un confinamiento total, de lo contrario tendremos una implosión del servicio sanitario nacional”, advirtió el presidente del Colegio nacional de Médicos, Filippo Anelli.

Alemania registró ayer el número más alto de muertos desde abril, mientras que las autoridades sanitarias advirtieron que la cifra de infecciones diarias no cayó lo suficiente como para provocar una inflexión en la curva de contaminación. La principal economía europea, que está bajo confinamiento parcial desde el 2 de noviembre con el fin de controlar la segunda ola, registró 18.487 nuevos casos y 261 muertes en 24 horas.

Contrariamente al primer confinamiento del año, Alemania conservó esta vez las escuelas y jardines abiertos, para que los padres puedan ir a trabajar, evitando así mayores daños a la economía nacional, que debería caer en la mayor recesión desde la Segunda Guerra Mundial.

El Covid-19 provocó más de 400 muertes en 24 horas el martes en España. Se trata de la cifra más alta de esta segunda ola.

El Reino Unido, el país más castigado de Europa, superó las 50.000 muertes. Con 595 nuevos fallecimientos registrados en las últimas 24 horas, el país sumó 50.365 decesos en los 28 días siguientes a haber dado positivo de Covid-19.

Estados Unidos, bajo fuego

Estados Unidos alcanzó ayer un récord de casi 62.000 hospitalizaciones por coronavirus (136.325 infectados) y superó 1 millón de casos en los primeros diez días de noviembre.

El incremento otoñal de casos parece ser mayor y más extendido que los del reciente verano y la primavera pasada y amenaza con ser mucho peor todavía, aunque expertos dicen que también hay razones para creer que el país esta vez está mejor preparado.

Las nuevas infecciones diarias están por encima de las 100.000, y el total ya supera los 10,25 millones luego de que el país sumara 1 millón desde el 31 de octubre.

OMS: filtran grabaciones sobre estrategias de países

Mientras el coronavirus se propagaba por todo el mundo, los científicos de la Organización Mundial de la Salud se sintieron en ocasiones frustrados por los errores de algunos de sus principales donantes, aunque fueran reacios a decirlo en público, según grabaciones filtradas de reuniones internas del organismo.

La agencia de salud de Naciones Unidas, que fue muy criticada por no adoptar una posición más firme para frenar la pandemia, celebra esta semana su reunión anual bajo una intensa presión para que haga reformas.

La OMS también confía en que el presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, revoque la decisión de abandonar la organización anunciada en junio por el gobierno saliente de Donald Trump.

Uno de los dilemas centrales de la OMS es que no tiene capacidad para imponer medidas o investigar de forma independiente las epidemias. En lugar de eso, la agencia depende de negociaciones entre bambalinas y de la cooperación de los países.

Cuando la pandemia empezó a ganar velocidad, la OMS evitó señalar a algunos de sus principales donantes, como Japón, Francia y Gran Bretaña. Los científicos de la OMS describieron algunas de sus estrategias como “macabras”.

Fuente: lavoz.com.ar